Descripción
Este espejo de pared de madera de aspecto envejecido es práctico, así como un complemento decorativo para tu baño, dormitorio o vestidor.
El espejo de pared está hecho a mano con madera maciza reciclada, una combinación de maderas recicladas que incluyen teca, madera de mango, de pino, de haya, etc. Dichas maderas proceden de antiguas construcciones como fábricas, cobertizos y barcos. Por eso, resultan una opción sostenible en la fabricación de muebles. Como cada pieza está hecha a mano, los colores varían en tonos azules, verdes y crema, y a veces se revelan sombras naranjas, rojas y rosas. ¡Esto significa que cada pieza es única! Los signos de desgaste y la estructura de vetas visibles son indicativos de la rica historia de la madera y le dan al espejo un aspecto cálido y auténtico. Cada paso del proceso se lleva a cabo con el máximo cuidado, ya sea el pulido, la pintura o el lacado.
Está listo para ser montado en la pared gracias al gancho ya instalado en el tablero.
Nota importante: Los colores varían de una pieza a otra, lo que hace que cada uno de nuestros espejos sea único; la entrega es aleatoria.
- Material: Madera maciza reciclada, cristal
- Dimensiones: 50 x 80 cm (largo x alto)
- Pulida; pintada y lacada
- Fácil de montar en la pared